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jueves, 20 de noviembre de 2014

La alargada sombra de un rey


Sabemos que la sociedad evoluciona a través del caos que la sacude cíclicamente y Luchino Visconti dio buena cuenta de ello mediante el sufriente y legendario ‘Ludwig: Luis ll de Baviera’ (1972), el profundo retrato de un hombre que desapareció junto a su época. Entrañable, creo, a pesar de todo.

No me resulta descabellado establecer conexiones entre este personaje y el director milanés, puesto que ambos son, por ejemplo, sensibles, exquisitos, homosexuales y aristócratas. Sin embargo, preguntada al respecto Suso Cecchi d’Amico, una de las guionistas del film, responde: “Luchino tenía un carácter muy fuerte; Ludwig es débil”.

El extenso rodaje de seis meses de duración hizo caer a su realizador en la enfermedad, pero con el papel protagonista concedió a Helmut Berger, su pareja, una oportunidad que éste aprovechó notablemente.

Enmarcada en la trilogía alemana de su autor junto a ‘La caída de los dioses’ y ‘Muerte en Venecia’, ‘Ludwig’ entraña un libre esbozo del Rey Luna que es recordado por su demencia y por anteponer su amor al arte frente al gobierno de Baviera. Estamos además ante una figura que se va tornando más esperpéntica a medida que envejece a causa de sus desvaríos.

La peli, con una ambientación de inevitable sello viscontiano, sólo queda un tanto deslucida por esa moda de la época de usar el zoom profusamente. Por lo demás, me parece una interesantísima forma de conocer a un hombre que ya forma parte de la Historia.

martes, 7 de octubre de 2014

Oliveira, lujo en el alma

Después de vacaciones no podía haberme hecho mejor regalo que una suscripción a Filmin. Quizás por eso me ha costado seleccionar una peli entre tanta joya. Hasta miedo me da acostumbrarme de contínuo a tal cantidad de obras maestras ;)



Una de las que me ha entusiasmado ha sido “Singularidades de una chica rubia” (2.009) de Manoel de Oliveira. Se trata de un film introducido por Leonor Silveira y protagonizado Por Ricardo Trêpa – dos de los actores fetiche del longevo director portugués- que ahonda, siempre con dobles capas de significado, en las trampas del amor platónico.

En esta obra de poco más de una hora de duración, el protagonista se enamora de una chica rubia que, coqueta, agita su abanico en la ventana de enfrente del despacho en que trabaja.
Oliveira usa abundantes planos sostenidos en cuyos encuadres, con cierta profundidad de campo, la vida fluye a borbotones al son de la austeridad y melancolía lisboetas. Como en “Belle toujours”, otro de mis preferidos y más recientes films de este realizador, el rol principal se centra en un caballero sentimental y nostálgico en constante búsqueda del amor inalcanzable que se escapa entre los recovecos del recuerdo y la imaginación.





En definitiva, toda una peli ‘gourmet’ muy recomendable.

sábado, 7 de junio de 2014

Un lugar en el mundo


‘A propósito de Llewyn Davis’ y ‘Oh boy’ cuentan ambas, con pulsos y estilos muy diferentes, la historia de un joven que busca su sitio en el mundo infructuosamente. La primera de ellas tiene un estilo bellamente depurado y en la segunda encontramos el retrato de un Berlín tintineante y moderno a ritmo de jazz.

Por su parte Llewyn Davis desea ser cantante de folk, aunque en su camino se tope a un nutrido grupo de otros tantos como él. Hay quien dice que este filme recuerda a cierta biografía de Bob Dylan, y a pesar de que su final no resulta apabullantemente feliz como el de algunos músicos –tal es el caso de ‘Searching for Sugar Man’, por ejemplo- estamos, no cabe duda, ante el relato existencial de quien persigue un sueño y no ceja en su empeño, contado todo con una impecable estética y sencillez extremas que aluden a la madurez de los hermanos Coen, los directores.

Al contrario que Llewyn Davis que hace parada en casas de amigos y que lleva una maltrecha existencia, el protagonista de ‘Oh boy’ vive sin pesar alguno a costa de su padre, a quien engaña haciéndole creer que está estudiando.
Niko, el personaje principal, da tumbos por la ciudad perdiéndose para encontrarse. Más cómica en general que la anterior, ‘Oh boy’ se va tiñendo de pesimismo a medida que avanza.



Interesantes teniendo en cuenta el panorama de nuestras carteleras, creo que los dos son films que no deberíamos perdernos…o que al menos a mí me han encantado.

jueves, 5 de junio de 2014

Arrebatados


Por prejuicios no había visto 'Arrebato' de Iván Zulueta hasta el otro día, pero ahora que lo he hecho me parece totalmente recomendable, bella e inefable! (Está subida a YouTube aunque es casi un sacrilegio no visionarla en pantalla grande con su destacada paleta de colores :) 

martes, 3 de junio de 2014

Desventuras de una mujer salvaje


“Fui a los bosques porque quería vivir deliberadamente, enfrentar en soledad los hechos esenciales de la vida, y ver si podía aprender lo que ella tenía que enseñarme, no fuera que cuando estuviera a punto de morir comprendiera que no había vivido” (David Thoreau).

‘Las amigas’ (1955) es una película de Michelangelo Antonioni que más allá de tratar de uno de los temas más recurrentes del director como la incomunicación, habla acerca de unas difíciles relaciones hombre-mujer y sobre la amistad.
Clelia, el rol principal, acaba de llegar a Turín desde Roma para trabajar en una de las boutiques de su empresa cuando conoce en su hotel a Rosetta, una joven que ha intentado suicidarse y de la que se encariña. Así, entre el mapa de amistades que se entretejerá posteriormente, observamos cómo siempre que la mujer desea estar con un hombre ha de renunciar a sí misma. Tal vez por ello una de las protagonistas apunta que “una mujer que vale más que su hombre es una desgraciada”. Estamos ante gente que se busca a si misma y a su instinto perdido y que a veces usa a los otros como frío sustituto.
De todos los personajes, Clelia encarna a la que parece encontrar mayor acomodo en la vida y la que actúa sin dobleces, pues dice que se basta para sí y que ‘trabajar es mi forma de ser mujer, de estar en el mundo, de vivir…”.




De regusto amargo, ‘Las amigas’, adaptación de un relato de Cesare Pavese, queda confinada como una película menor de Antonioni que reviste en realidad mayor profundidad de la que pudiera parecer a simple vista.

miércoles, 21 de mayo de 2014

Los días de David Perlov


Entre 1973 y 1983 David Perlov filmó su ‘Diario’ (‘Yoman’) valiéndose para ello de una cámara, de su mujer e hijas y de algunos amigos. El cineasta pergeñó este proyecto utilizando primero su tiempo como desempleado (acaso para no morir de hambre espiritual) y aunando en ocasiones los sinsabores de la guerra, algunas circunstancias personales más la cotidianidad que consigue transmitir y transmutar de gusano a crisálida.

Perlov no era ningún neófito, aunque al principio parezca que nos quiere suscitar esa sensación. Además a medida que avanza esta obra, más dotado se nos muestra, convirtiendo su verbo, formas cinematográficas y aburrimiento en arte.
Él reflexiona abundantemente con su cautivadora voz en off, ésa que vertebra toda la cinta y que le confiere unidad a pesar de estar rodada en diferentes países y años.


Otro punto que me interesa reside en el tipo de no ficción que introduce Perlov, ésa que deja claro que lo que ahí vemos tiene realidad, pero que a su vez está cercenada o esculpida según los intereses personales del autor que ya previamente había realizado documentales. Justo por todo esto y por erigirse en un fascinante film al margen de los circuitos comerciales, me parece bastante recomendable.

jueves, 8 de mayo de 2014

El humor que nos salva


‘Se está muriendo gente que no se había muerto nunca’…Con perlas como ésta Paco León construye un mundo grotesco al que resulta fácil tomarle afecto. Por un lado por la fuerza arrolladora de su personaje principal, la actriz no profesional Carmina Barrios, y por otro, por la energía desbordante de su sentido del humor, ése que nos libra de cualquier tragedia al recordarnos que pertenecemos aún al mundo de los vivos.

Con ‘Carmina y amén’ León pone la guinda a la anterior ‘Carmina o revienta’, ambas protagonizadas por su propia madre, grande en todos los sentidos y con un toque inevitable de aires fellinianos. Ésta representa, cómo no, al prototipo de matriarca que sigue adelante a pesar de todo.

En la presente ocasión la trama gira alrededor de la muerte del marido de Carmina –ese hombre que tiene sólo ‘un poquitito de esquizofrenia’- y de la necesidad de ésta de mantener su cadáver oculto durante dos días para cobrar la paga.

Ante nosotros desfilan a lo largo del metraje toda una suerte de roles impagables que nacen de la exageración de lo doméstico y lo cotidiano. En cualquier caso, Paco León deja constancia de que es mucho más hábil detrás que delante de la cámara.


jueves, 24 de abril de 2014

Un recuerdo para toda la vida


Se supone que todo el mundo ha visto ‘Casablanca', como tantos otros clásicos del cine estilo a ‘Cantando bajo la lluvia’ o ‘Doctor Zhivago’. Pero tal vez esto sea demasiado suponer. Tal vez como Sofía Mazagatos con los libros de Vargas Llosa, muchos “no han tenido la oportunidad”. Y eso que se pierden, porque ‘Casablanca’ no es sólo un compendio de frases inolvidables tipo ‘Siempre nos quedará París’, ‘Tócala otra vez, Sam’ o ‘El mundo se derrumba mientras nosotros nos enamoramos’, a veces incluso forma parte de la columna vertebral de nuestro imaginario cinematográfico. Porque Rick Blaine (Humphrey Bogart) pasó a erigirse en un icono sexy para nosotras, e Ilsa (Ingrid Bergman) se grabó a fuego en la memoria masculina como la pavisosa chica lánguida por excelencia.


Este film como lo entendemos hoy se rodó casi por casualidad, como pasan las mejores cosas en la vida. Todo en él resulta mítico, igual que el hecho de que se anticipase la presencia de Blaine mediante el humo de su cigarro, ese sello inconfundible que también lo fue del propio Bogart. Y qué decir a  este respecto sobre la frontera tan difusa entre actor y personaje, ya que no sabemos dónde comienza el uno y acaba el otro, de la misma manera que el resto de esos roles de cuño tan romántico y de tan hondo honor y sentido del deber.





Y así sin pretenderlo, mediante esta película se cuajó uno de los más sólidos prototipos de amor desgraciado pero digno. O dicho de otro modo, un amor para el recuerdo…o para toda la vida.

jueves, 17 de abril de 2014

La mirada de un hombre con suerte


John Berger (1926) es un creativo historiador del arte y escritor, autor entre otras muchas obras de ‘Un hombre afortunado’(1966). Este libro cuenta la vida del carismático médico rural John Sassall y está aderezado por las sugerentes imágenes del fotógrafo Jean Mohr, sin las cuales no podría ser. No resulta difícil advertir el grado de implicación y emparentamiento de Berger con la historia del doctor  y su persona, algo que por ejemplo, puede deducirse de estos fragmentos:

‘Sasall es un hombre que está haciendo lo que quiere hacer. O para ser más precisos, un hombre que sabe lo que busca’. ‘Al igual que los artistas o que cualquiera que crea que su trabajo es la justificación de su vida, para los estándares miserables de nuestra sociedad, Sassall es un hombre afortunado’.

Esbozados unos trazos sobre él y en lo que respecta al resto de su trabajo, sobre todo a ‘Modos de ver’, los documentales que me ocupan, cabe decir que John Berger se manifiesta como un hombre sensible y con un pensamiento fresco digno de tener muy en cuenta para los amantes del arte. En definitiva, un teoríco con la emotividad del artista que también es.








jueves, 20 de marzo de 2014

'L'Atalante', la más hermosa de todas


Pongo esta foto de ‘El espíritu de la colmena’ porque ésa es la cara de admiración que se me queda a mí también viendo una obra maestra como ‘L’Atalante’. Elegido uno de los grandes films de la Historia por numerosas publicaciones, esta cinta del cine impresionista rezuma poesía, lirismo y dulzura con un saber hacer incomparable y con un blanco y negro que en esta ocasión es más que nunca el color del alma.

‘L’Atalante’ (me) produce calidez y sensación de ‘estar en casa’ por la delicadeza y pureza de sus personajes así como por el lenguaje cinematográfico de tan altas cotas al que llega Jean Vigo. Un lenguaje lleno de maestría por la colocación de la cámara (planos centitales) y el lugar que ocupa en el encuadre (montaje interno), algo que subraya a este mítico realizador como deudor de los anteriores y más excelsos hitos del cine.


En cuanto al argumento, el presente filme cuenta la historia de los recién casados Jean y Juliette que se embarcan en la nave de él para iniciar su vida juntos como marineros. ‘L’Atalante’ ha sufrido incontables montajes distintos y mutilaciones a lo largo de los años. Los principales se remontan a 1934 (una vez muerto Jean Vigo prematuramente a causa de tuberculosis), a 1940 y a 1990.
Hace pocas semanas y con motivo de su ochenta aniversario la productora Gaumont ha sacado a la venta una excelente copia restaurada en DVD y Blu Ray.